Las niñas muertas no crecen

Las noches de insomnio son difíciles. Un método vital, riguroso y aburrido, garantiza que recuerdes lo que has soñado mientras dormías, pero no corrige tus ansias de lamerle la entrepierna a tu alumno favorito. Las niñas muertas no crecen. Los vivos se suturan el corazón con la mano zurda; el dedo índice marca el lugar y las uñas de bruja del Este hacen el resto. Las niñas muertas no juegan. Al escondite. Las rubias se congestionan antes. Las pelirrojas, casi transparentes, se deshacen. Las morenas sobreviven. Todas te invitan a té con pastas pasadas las cinco. Cruzan las piernas y sonríen educadamente. Las niñas muertas no dicen que no.

1 comentario:

Anónimo dijo...

no crezco, pero sigo cumpliendo años